Como Liebre Acosada [La Course du Lièvre à travers les Champs] (1972) de René Clément

comoliebreacosada 35

René Clément fue uno de los grandes perjudicados por las teorías de autor que propugnaron en los años 50 los influyentes críticos de revistas como Cahiers du Cinéma, ya que fue señalado como ejemplo del cine francés que estos jóvenes pretendían derrocar. En realidad, lo de «perjudicado» es relativo, ya que Clément gozaba de reconocimiento tanto en Francia como en el extranjero y llegó a participar en algunas producciones de alto nivel; pero a día de hoy es uno de esos nombres que han acabado algo sepultados al olvido. Seguramente no sea uno de los más destacados realizadores de un país que, por otro lado, tiene un historial apabullante de cineastas inolvidables, pero eso no quita que fuera un buen director con unas cuantas obras dignas de interés. La más recordada ha sido Juegos Prohibidos (1952), con ese retrato tan acertado de la infancia en tiempos de guerra, pero hoy nos detendremos en una de sus últimas películas

Curiosamente, en los años 70 Clément decidió volcarse por completo en obras de suspense que además contaban con estrellas internacionales como Charles Bronson y Faye Dunaway. Como Liebre Acosada sigue esa misma pauta con un reparto encabezado por una estrella norteamericana (Robert Ryan) y otra francesa (Jean-Louis Trintignant).

Liebre acosada (3)

Después de un críptico prólogo en que vemos a un niño intentando unirse a un par de grupos callejeros que le dejan de lado, asistimos a un inicio realmente desconcertante por la poca información que se nos da. Un francés llega en tren a Montreal y es asaltado por unos gitanos, que le quieren matar por algo de lo que se supone que es culpable pero que no se nos especifica. El francés consigue escapar y tiene lugar una persecución que acaba desembocando en un edificio vacío donde éste se cuela y se topa, por accidente, con un asesinato. La víctima le confía una importante suma de dinero y seguidamente dos matones haciéndose pasar por policías le llevan consigo. Nuestro protagonista – que acaba siendo bautizado como Froggy, aunque luego sabremos que se llama Tony – acaba inesperadamente en una pequeña granja aislada del mundo por un lago, donde una serie de gángsters intentan sonsacarle dónde se encuentra el dinero hasta que, progresivamente, Froggy/Tony decide unirse a ellos.

Este alucinante inicio parece sacado de Con La Muerte En Los Talones (1959), otro film en que vemos a su protagonista huyendo de unos enemigos mientras se enfrenta a situaciones a cada cual más surrealistas. Si bien es cierto que el ritmo empieza a serenarse con la llegada a la granja, el film nunca abandonará ese tono, a ratos algo humorístico, a ratos simplemente extraño.

Liebre acosada

De hecho la improbable pandilla de gángsters con la que Froggy/Tony se encuentra incluye a Mattone, un ex-boxeador que se comporta como un niño consentido y viste un ridículo jersey que casi parece infantil; Rizzio, un educadísimo y eficiente matón judío cuya especialidad parece ser noquear a gente con bolas de billar y que talla piezas de ajedrez en sus ratos libres; Pepper, una bella huérfana que resulta ser una experta tiradora y parece vivir inmersa en su mundo; Sugar, que ejerce un extraño papel de madre-cortesana para todos ellos mimándolos con sus pasteles; y el cabecilla, Charley, un veterano criminal que espera retirarse pronto.

Más que unos gángsters tradicionales, parecen unos niños jugando a ser gángsters, algo que se remarca en ocasiones como cuando juegan entre ellos después de comer, especialmente Mattone y Rizzio sonriendo inocentemente mientras intentan encestar papeles en una improvisada canasta. Por otro lado, Mattone se comporta claramente como un niño crecido: Charley le abofetea cuando se comporta mal, se queja de todo entre lloriqueos y se enfada creyendo que siempre la toman con él. Resulta conmovedor cómo al final de la película, cuando Mattone es herido por una bala, Charley le coge en brazos y le pide que le hable, después de pasarse toda la película insistiéndole en que se callara.

Liebre acosada

Este estilo es lo que hace que la película sea tan única y especial. Los giros de guión, muy bien calibrados, no dejan de ser los típicos de un film de género (la forma como Froggy dosifica la verdad sobre su situación y ésta se va descubriendo, las luchas de poder entre los personajes, el triángulo amoroso, la amenaza exterior de los gitanos impidiéndole su huida, etc.); es el tratamiento de estos improbables gángsters y las situaciones que protagonizan lo que le da ese tono tan singular.

Siendo honestos, no siempre funciona y en conjunto creo que se trata de una película muy interesante pero también fallida, con algunos huecos de guión poco convincentes, incluyendo el golpe que están preparando, excesivamente enrevesado y sin mucho sentido. Del mismo modo el desenlace, que vuelve a evocar el inicio de la película con las canicas y la aparición del gato de Cheshire de Alicia en el País de las Maravillas, tampoco me parece del todo satisfactorio y evoca un simbolismo un tanto impostado.

Liebre acosada (9)

No obstante, aún no siendo una película redonda, sí que creo que a cambio es más que interesante y que funciona precisamente en aquello a lo que da más importancia: las relaciones entre los personajes y la forma como Froggy/Tony debe manejarlas, planificando cada movimiento como una jugada de ajedrez. Desde el principio se muestra amable con Sugar y pronto se vuelve receptivo a sus coqueteos, pero como ésta es supuestamente la amante de Charley dosifica sus avances con cuidado hasta que descubre que a éste último no le importa. El propio Charley es suficientemente astuto como para entender lo que hace Froggy/Tony y de hecho le felicita abiertamente cuando se gana a Sugar o Rizzio para su beneficio propio.

Otro de los puntos fuertes del film es su acertadísimo reparto. Jean-Louis Trintignant por supuesto no decepciona encarnando a ese protagonista amoral y aprovechado que sin embargo nos provoca cierta atracción. Sobre Robert Ryan no creo que haga falta decir nada, salvo que se trata uno de sus últimos papeles y que demuestra que hasta el final de su vida fue un actor mucho mejor de lo que se suele creer. Los instantes en que Charley nos hace sentir cierta misericordia por él funcionan gracias a Ryan, que sabe mantener su dureza pero dejando entrever ese poso de amargura a causa de su soledad.
El resto de nombres no son tan conocidos pero encajan perfectamente en sus roles: Aldo Ray como el ex-boxeador Mattone, Jean Gaven absolutamente encantador como Rizzio, Tisa Farrow (hermana de Mia Farrow) muy eficaz en un papel más pequeño pero inolvidable y, por supuesto, la italiana Lea Massari como Sugar.

Una película intrigante y muy peculiar.

Liebre acosada (7)

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.